miércoles, 11 de enero de 2012

De que hablo cuando hablo de correr, Haruki Murakami

En 1982, tras dejar el local de jazz que regentaba y decidir que, en adelante, se dedicaría exclusivamente a escribir, Haruki Murakami comenzó también a correr. Al año siguiente correría en solitario el trayecto que separa Atenas de Maratón, su bautizo en esta carrera clásica. Ahora, ya con numerosos libros publicados con gran éxito en todo el mundo, y después de participar en muchas carreras de larga distancia en diferentes ciudades y parajes, Murakami reflexiona sobre la influencia que este deporte ha ejercido en su vida y en su obra. Mientras habla de sus duros entrenamientos diarios y su afán de superación, de su pasión por la música y de los lugares a los que viaja, va dibujándose la idea de que, para Murakami, escribir y correr se han convertido en una actitud vital. Reflexivo y divertido, filosófico y lleno de anécdotas, este volumen nos adentra plenamente en el universo de un autor que ha deslumbrado a la crítica más exigente y hechizado a miles de lector..

                                                 Comentario
Mas que un libro es una biografia de el arte de correr, no es un improvisado ni un principiante quien corre dos maratones por año y a llegado a correr 100 kms. No se si es para que lo lea quien no disfruta del correr tal vez sí. Pero es bastante específico y nos lleva por todas la etapas de la carrera. Me gusto y capaz lo volveria a leer con un poco mas de calma. Pero no es solamente de correr nos mezcla su experiencia como escritor con correr. Como para conocer mas el autor de Tokio Blues. Ver que es algo mas que solo un escritor, nos lleva aun gran espiritu de superación y te dan ganas de salir a correr con el , sufrir sus calambres y cambio mde zapatillas, junto con su vida de escritor. Es el primer libro de él que leo y fué mas bien por el tema , pensé que era otra persona. Me gusto..***

1 comentario:

  1. Estimado amigo:
    nuestras actividades deportivas nos marcan, además corren paralelas a lo que hacemos y pensamos del mundo....vos sabes muy bien que hay un ejercicio que compartimos que nos permitía alcanzar en un salto la altura del cráneo de un hombre.... hoy al menos yo ...no...pase de la yoga al Tai Chi y de ahí al karate... luego el tenis... para terminar caminando dos veces por semana por el malecón de mi ciudad, esto lo único que tiene en común con el principio es que sigo meditando a lo igual que ayer....un abrazo.Franco

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