domingo, 22 de abril de 2012

El mar que nos trajo

Agostino, el protagonista de la novela de Gambaro, es traído por el mar. Cree estar eligiendo un futuro. Cuando, en realidad, no hace más que volver a empezar. Su destino se teje en las olas, y si bien el viaje desde Italia hasta Buenos Aires, a fines del siglo XIX, está centrado en la ilusión de nuevas tierras y, por lo tanto, de un mejor afincamiento en la vida, su partida, aquel verano de 1889, es producto del susurro del océano.(La Nacion, Bs. As.)
                                                       

                                         Comentario                  


Una historia, bastante común de la época delos emigrantes Italianos de principios de siglo, hacia Argentina y la vida dura, de ese país generoso y difícil de adaptarse tanto en el idioma clima y costumbres diferentes. Lo primero que te dice un Argentino, me trae recuerdos de mi niñez, de mi abuelos, tíos. El concepto del Siciliano y su reglas morales, y honor, la primera generacion en Buenos Aires, la miseria de los conventillos, el almacenero que te anotaba en la libreta. El dolor de no saber leer. Y sobre todo la vida dura de una mujer con poca suerte, pero con mucha alma. Conocí tantas Italianas serias, que seguían lavando a mano y la lavadora guardada, pero cuando te habrian los brazos, y los fideos amasados. Claro esta es una historia un poco mas dura, despues sus hijos fueron "Dotores" y estudiaron. Un buen libro.**

Las Horas Distantes

Una carta perdida durante muchos años llega por correo y Edie Burchill se encuentra viajando a Milderhurst Castle, una mansión inglesa en la que viven las hermanas solteras Blythe y en la que se alojó su madre durante la Segunda Guerra Mundial, cuando era una niña de trece años. Las hermanas Blythe mayores son gemelas y se han pasado gran parte de su vida cuidando de su hermana pequeña, Juniper, que no volvió a ser la misma desde que su prometido la abandonó en 1941. En el interior del ruinoso castillo, Edie comienza a desenmarañar el pasado de su madre. Pero las piedras de Milderhurst esconden otros secretos, y Edie está a punto de descubrir más de lo que esperaba. La verdad de lo que ocurrió en las horas distantes del pasado lleva mucho tiempo a la espera de que alguien la descubra. Morton una vez más cautiva a los lectores con una historia muy atmosférica que cuenta con unos personajes inolvidables acuciados por el amor y las circunstancias y obsesionados por los recuerdo. (Lecturalia)
                                                     

                                              Comentario

 Me deja contento la lectura de este libro, una buena historia, linda época. Como siempre la autora una casa antigua, historia familiar, encuentros y desencuentros y un buen final. En este caso un castillo Inglés, la segunda guerra mundial, tres hermanas. Muy disfrutado y siempre ese gusta de poder leer una historia bien contada. Con dosis de misterio y bastante historia. Lo recomiendo para leerlo y por supuesto esperando el cuarto, después de " La Casa Riverton", y "El Jardin Olvidado". En esta época de tanta lectura, a veces no muy jugosa, casi insustancial, una historia bien desarrollada, y un hermoso cuadro de época. Personajes inesperados, al principio parece trivial, pero va tomando forma. A quien le guste la época, el ambiente de Inglaterra, de los años veinte en adelante en una casa rural, que a veces pareciera hablar. En fin un interesante libro.***

viernes, 6 de abril de 2012

Que celebramos, digo.

Celebramos qué me pregunto. Mas bien celebramos un feriado heredado de la unión de la Iglesia Catolica y el estado.
Hoy solo se celebra el feriado, mas grande o mas chico. Hablo de la generalidad, por supuestos los Catolicos celebran la Semana Santa. Pero la gran mayoría no. Otra de las cosas hipocritas  de nuestra sociedad, o será que los feriados son feriados, solo por que son feriados. No trabajo, para todas clase dependencias de los gobiernos, y algunos particulares. En mi caso lo feriados son peores que lo no feriados trabajo mas.Son las pa
radojas que ya nos tiene acostumbrado esta sociedad, y resabios de una Iglesia Catolica.
Y el gran y nuevo concepto de Industria sin chimenea o sea el "Turismo", que esta terminando de destruir lo poco autoctonos que nos quedaba. Inundacion de gente de las ciudades a los pequeños pueblos que con tal de hacer unos mangos, nos ponemos plumas en la cabeza y cobramos 1 dolar por foto. O sea vendemos la miseria y el abandono.
Los países regalaban un día de su trabajo para reconstruir antes, ahora una semana de feriado, para que vendan unos pocos y que los funcionarios se vayan a las playas caras, a tirarse panza para arriba.
Y en mi razonamiento, pienso, que seria semana santa en America 400 años atràs,  te convertis o la , hoguera. Bueno a celebrar el feriado de Semana Santa, por lo menos los Uruguayos le dicen "La semana del Turismo"  ..saludos..